Síndrome de Raynaud
“¡Sal de aquí!, ¡tienes las manos heladas!”. Si alguna vez les han dicho esta frase, probablemente les interese este artículo. Si reiteradas veces se la han dicho, entonces, seguramente estarán interesadísimos.
Tener las manos frías es un padecimiento muy frecuente en las mujeres. Un padecimiento que aún cuesta explicar, pues los expertos en circulación aún desconocen la razón por la que los vasos sanguíneos de las mujeres, responden al frío, de forma distinta que los de los hombres.
Hay personas que son frío-sensibles, es decir, muy sensibles a las bajas temperaturas y sus manos reaccionan a estas. Algunas de esas reacciones son completamente normales: por ejemplo, durante los días fríos pueden cambiar un poco el color de las manos, como una respuesta fisiológica típica, producto de una menor cantidad de sangre en las manos y los pies.
Pero otras veces, esas reacciones no son ni tan “típicas” ni tan “normales”. Y por ejemplo, cuando el cambio en las manos es más drástico y llamativo, la causa puede ser el llamado Síndrome de Raynaud. La enfermedad de Raynaud afecta a 1 de cada 20 personas y es de 4 a 5 veces más frecuente en mujeres que hombres. Por lo general, el primer episodio de este síndrome se manifiesta antes de los 40 años.
Este trastorno surge como resultado de cambios en la circulación de las manos o los pies. Se manifiesta como una exageración del fenómeno normal de reflejo, por el cual los vasos sanguíneos de las extremidades se contraen cuando hace frío. ¿Qué causa esa predisposición exagerada? No lo sé. La respuesta aun es desconocida.
El síndrome de Raynaud se caracteriza por cambios constantes en la coloración de la piel de aquellas regiones más distantes del cuerpo, como son los dedos, la lengua y la nariz. En estas zonas, produce espasmos en los vasos capilares y restringe el flujo sanguíneo. Tales espasmos son precipitados, usualmente por la exposición al frío, pero también pueden ser causados por situaciones agotadoras de cansancio.
Este síndrome provoca que los dedos de las manos y los pies se pongan blancos, rojos o azules cuando las personas sienten frío, en respuesta a las alteraciones en el flujo de la sangre en las extremidades.
Solucion o Tratamiento.
Lo cotidiano y esencial para evitar el síndrome de Raynaud, es protegerse del frío, usando ropa adecuada, agarrando bebidas frías o congelados con guantes o algún otro aislamiento adecuado, etc.
Otro factor fundamental es no fumar. Ya que la nicotina disminuye el flujo sanguíneo a la piel. Además debe procurarse hacer buen ejercicio físico en forma regular, pues ayudará a mejorar la circulación y el tono de los vasos sanguíneos, y por ende a prevenir el síndrome de las manos frías.